Oferta de emociones

Esta semana, mi amigo y bloguero Julen, hizo una reseña o post interesante, (Capitalismo, brazo, cerebro y corazón) sobre las nuevas cualidades de las empresas, luego de la situación económica que ha afectado a todo el mundo. Le agrega, a la visión de la empresa, “el corazón”.

¿Y qué quiere decir “tener corazón?.

Nacho Muñoz coloca en el blog de Julen, un comentario que no quisiera pasar por alto, ya que cada una de las palabras, se encuentra en su lugar correcto. Hago referencia:

"La verdadera función de los directivos que se encargan de las personas en la empresa (¿RRHH?), desde mi punto de vista es la siguiente:
Incrementar el rendimiento económico de la empresa a través de las personas, incrementando la satisfacción (y por qué no, el orgullo) de las personas por pertenecer a la empresa.
Sólo a través de una oferta de emociones a las personas en su hábitat profesional por parte de la empresa, y el posterior consumo y disfrute de esas emociones, puede hacer transformar a las personas en profesionales comprometidos con una misión empresarial estratégicamente asociada, (siempre, las empresas no son ONG´s) al incremento de los beneficios."

¡Oferta de emociones:!

Me recuerda un poco a BTL, (Below the line), el espejo del marketing ATL, (Above the line). La diferencia en mercadeo lo hace una línea, línea que a veces es indeleble cuando se hacen eventos que persiguen promover emociones, recuerdos, simpatías, etc, dentro de la organización.

Por otro lado, un tema al que ya he hecho referencia anteriormente, es la “Ecología de aprendizaje”; una suerte de experiencia sensorial, en la que los participantes cooperan, colaboran, generando un ambiente de trabajo altamente innovador. Estos casos ya han sido estudiados ampliamente en las empresas que cohabitan en el Silicon Valley de Palo Alto, California. Haciendo referencia nuevamente a la frase de Nacho, la empresa que logre generar emociones en su “hábitat” de trabajo, seguramente tendrá garantizado un compromiso de su talento, y no como estrategia de negocio, lo que la volvería mercantilista y frío, sino como una estrategia de funcionamiento y de visión de futuro, como un activo intangible.

Ya he estado antes en empresas que aunque no estructurándolo como estrategia, le ha podido suceder, porque su ambiente, estructura jerárquica y medio ambiente, así lo propician. Imaginen entonces, que dado el ambiente, y existiendo la estrategia y la visión de la alta gerencia, que cosas mágicas podrían ocurrir. Sin dudas, en la visión sistémica de la organización, un círculo virtuoso de innovación.

He nombrado también el BTL (mercadeo debajo de la línea), porque es a través de eventos planificados altamente emocionales, que podemos incitar o activar el círculo innovador. Colocar vallas informativas, dictar talleres de valores, capacitar a su talento humano, crear ambientes de aprendizaje y de comunicación, son algunos de los elementos con que cuenta una empresa para motivar y cuidar a su gente.

Hay que tener cuidado de que la alta gerencia esté comprometida y considere que una serie de eventos que generen emociones, no va a ir en contra de la productividad, sino a favor.
¿Cómo sabemos que está sucediendo? Se me ocurren varios eventos que pudieran aproximarnos al hecho:

1. Básicamente, si caminas por los pasillos de tu empresa y observas varios anuncios de eventos, organización de talleres, sabes que algo está pasando.
2. Si observas que existen iniciativas individuales o de grupo para hacer mejoras en procesos o productos.
3. Si la gente quiere participar en el medio de comunicación impresa interna y además lo colecciona.
4. Si la gente de un departamento organiza talleres de su área de experticia, para dictárselo a otro departamento.
5. Si se hacen amigos en la organización.
6. Si ves a los de “arriba” enseñando a los de “abajo”.
7. Si se organizan comunidades de aprendizaje, donde los expertos enseñan a los novatos, fuera de sus horas de trabajo y sin que nadie se los pida,
8. Si ves a un jefe almorzando con un obrero,
9. Si ves que todas las salas de reuniones están ocupadas con presentaciones, talleres e iniciativas 10. Si la gente sonríe.,

Si suceden algunas o todas de estas cosas, puedes inferir que algo está pasando. No trates de reglamentar, estructurar o normar; deja que las cosas sucedan, e incentiva, aprende del evento y promueve la generación de conocimiento tácito-tácito. Es la magia de la ecología organizacional; crece, florece y da frutos.
No es fácil, pues hay que romper varios paradigmas de trabajo, uno de ellos, aprender a distinguir entre lo necesario, lo importante, y lo urgente. Otro, aprender a diferenciar entre la diversión para no producir, y la producción divertida. Un poco del Valle de silicón, un poco de la magia de trabajar en Google.
Alberto

(Imagen tomada de www.miamism.com)