Decía Karl Sveiby, por 1997, que el valor de una empresa era
una relación entre tres variables; el valor de mercado, el valor en libros o
valor contable, y su capital intelectual o de los intangibles. Es así como
despejando la ecuación obtiene, que el capital intelectual es,
CI = VM- VC,
o lo que es lo mismo, el valor de lo que no se
registra en libros pero que le da valor al negocio, es igual a la diferencia
entre lo que nos ofrecen, menos lo que vale la empresa por los libros; algunos “osan”
llamarlo la “plusvalía”.
Es así como el gerente tiene que poder administrar tanto el
valor o capital financiero, el capital humano o social, y el Capital
Intelectual, que como vemos en el gráfico, estaría formado por los capitales,
estructural, tecnológico, negocio y relacional.
Los dos primeros capitales son realmente más conocidos para
gestionar; el capital financiero se encuentra en los libros de finanzas y su
gestión está universalmente acordada, el capital humano y social, (ahora lo
llamamos gestión de gente o de inversores de conocimiento), que depende de la
gente, ha debido ser mas atendido desde que la responsabilidad social
empresarial, es una estrategia de negocio. Pero existe un vacío en el tercer
capital, el intelectual, o intangible.
Como ya mencionamos, el capital intelectual, estaría formado
por cuatro piezas importantes; veamos un tanto sus significados:
Capital estructural: está formado por las infraestructuras,
el lugar de trabajo, las facilidades, las amenidades y la política ergonómica. Últimamente
ha cobrado mucho interés debido a empresas que como Google, que crean espacios
para el deleite y la felicidad. No solo la estructura física que soporta la
empresa se encuentra acá, sino que se incluye la “estructura” moral-social, la
cultura y sus valores.
Capital tecnológico: se incluyen el software, el hardware,
la comunicación y los sistemas internos y externos de comuni9cación, y la capacidad
que tiene la empresa para actualizarse y actualizar a sus inversores de
conocimiento.
Capital negocio, son los productos, las marcas, las
patentes, las fórmulas y la capacidad de innovar que se tenga, y agregaría la
mejor forma de hacer las cosas “Know how”; y por último,
Capital relacional. Es un capital intangible pero que se
encuentra en toda la cadena de generación de valor en la empresa. Está basada
en la confianza, en el apego positivo, en la credibilidad. Se incluyen los
proveedores y los clientes, así como los sistemas de relación interna entre el
personal y la forma en que se genera, se transmite, su guarda, se actualizan y
circula el conocimiento. Se incluye, como la cultura ha impactado en las
relaciones entre el maestro y el aprendiz.
De todos los capitales mencionados, podemos decir que una
parte del capital estructural, puede ir a libros, al igual que parte del
capital tecnológico pueda ser llevado a gastos, aunque queda por fuera y de difícil
definición, la oportunidad de contar con la tecnología o los afectos que se
puedan desarrollar por contar con infraestructura que contamos. Igual pasa con
el capital negocio; hay empresas que llevan contablemente sus marcas, sus
patentes y sus fórmulas. La capacidad de innovar no se puede asentar en libros.
La que si no tiene en principio, ninguna parte para registrar en libros, es el
capital relacional, y para entender esto veamos un caso:
“Palex CA; es una empresa que fabrica productos de consumo
masivo. El 70% de su materia prima llega del exterior y se procede a elaborar
los productos que luego comercializa. Estos productos, han ido progresivamente ubicándose
en el gusto del consumidor y cada vez más clientes lo seleccionan para tenerlos
en su portafolio. La empresa está creciendo y diversificándose”
Como vemos, la
empresa basa su crecimiento, en la confianza con sus proveedores,
especialmente. Durante años se han reforzado lazos comerciales que le han
permitido, diferir pagos, aumentar la capacidad de financiación, desarrollo de
nuevos productos y hasta ahorro en alguno de ellos.
De todos los activos intangibles, este capital intelectual,
el relacional, quizá sea el más delicado de todos. Imaginemos por un momento que
ocurriera una compra forzosa o una expropiación; quizá las relaciones con los proveedores
y clientes se vería afectada, ocasionando que la empresa tenga que desarrollar
nuevos vínculos, lo que llevaría algún tiempo y quizá para entonces, tuviera
problemas financieros importantes.
Siempre ha sido la gestión de la gente unos
de los factores mas importantes en la gestión de empresas; sin embargo en casos
como el narrado, la gestión de las relaciones adquiere una importancia vital
para el desempeño en la cadena de valor. Por eso quizá sea, la reputación, uno
de los principales valores del ser humano.