lunes, julio 28, 2014

La Indagación: nueva disciplina organizacional

La gente que ha cambiado el mundo quizá en algún momento se haya hecho una pregunta poderosa acerca de un tema determinado y posiblemente paradigmático. Es así. como a través de una pregunta bien realizada se pueda tener una interpretación distinta del mundo, y así poder tener una nueva mirada o una nueva perspectiva; cosas increíbles pasan al cambiar la mirada.


En las escuelas nos enseñan a responder; todo se basa en preguntas que merecen tener respuestas, lo que induce a que los estudiantes, en vez de incorporar conocimientos, deseen memorizar las respuestas a todo lo que se supone que deben saber. Si bien es cierto que ejercitar la memoria es un buen ejercicio cognitivo, también o mas importante lo sea el descifrar, el asombrarse, el descubrir, el resolver problemas, o el tener aprendizajes significativos, pues todas ellas nos llevan a incorporar conocimientos y derivar de ello, mas preguntas que requieren ser atendidas. Pensar es Indagar. Del trabajo de Echeverría citando un estudio de Neil Postman y Charles Weingartner, (Echeverrìa, 2010):


“El conocimiento se produce en respuestas a preguntas. Nuevo conocimiento resulta de hacer nuevas preguntas; muchas veces nuevas preguntas sobre viejas preguntas. El punto es éste: una vez que hemos aprendido a hacer preguntas- preguntas relevantes y apropiadamente sustanciales- hemos aprendido como aprender y nada puede evitar que uno aprenda lo que uno quiera o necesite aprender”

En cuanto a esto último me he imaginado como sería una conversación cuando ambos tienen las herramientas de la indagación. Mantener un diálogo basado en preguntas, a veces suele ser un excelente ejercicio para comprender y para romper ciertos paradigmas que nos impiden conocer aún mas.


-Profesor,¿ me puede explicar otra vez?
-¿Puede ser mas tarde?
-Disculpe pero ¿me puede volver a explicar ahora?
-Claro, que quieres que te explique?
-Es verdad que ¿hacer preguntas es mejor que dar respuestas?
-¿Cómo defines dar respuestas?
-Para dar respuestas ¿hay que haber comprendido antes, correcto?
-¿Tù crees que la comprensión de las cosas tiene que ver con los actos indagativos?
-Indagación es hacer las preguntas correctas?
-Si Indagación es hacer las preguntas correctas, ¿Cuál es tu duda?


En las organizaciones, a menos que sean las “organizaciones que aprenden “ de Peter Senge, suele suceder que a los gerentes les importe mas una buena respuesta que una buena pregunta. Y quizá así sea en las empresas de desempeño, donde nada cambia, las respuestas sean lo importante, mucho mas, que hacer buenas preguntas. Pero resulta que en las organizaciones que aprenden con, la visión compartida, el manejo emocional, el trabajo de alto desempeño y en equipo, el pensamiento bajo mapas mentales y con el pensamiento sistémico, (las 5 disciplinas de Senge), quizá lleguen a ser mucho mas innovadoras, pues no interactúan bajo premisas reactivas sino mas bien pro activas; con la mirada hacia adelante. El arte de hacer preguntas o el saber indagar apropiadamente, quizá venga a ser la sexta disciplina empresarial, para la conformación de empresas inteligentes o aquellas que son capaces de aprender de si mismas.


Esta nueva fase del management, seguramente estará influenciada por la llamada “Indagación apreciativa” que siendo en una parte una filosofía empresarial, se constituye como un aprendizaje desde adentro, al reconocer lo que han hecho bien las personas y analizando bajo que fortalezas de carácter lo realizó. Ya no se trata de buscar afanosamente los errores y perder tiempo en la búsqueda de culpables, sino en ver que nos produce avanzar y progresar. Con ello, nos permitimos soñar y visualizar una mejor organización para poder en consecuencia, diseñar un plan de acción y llevarlo a cabo de la misma forma exitosa en que se fue capaz de ejecutarla en anteriores ocasiones. Esta nueva visión es del profesor David Cooperrider y Miriam Subirana, en su libro “Indagación apreciativa” (Wiki,2014)


Quizá suela suceder que en plena revolución del conocimiento, que haya un subordinado que tenga mas conocimiento que su jefe, en su dominio de experticia. El saber escuchar, desde la gerencia superior, conllevará empresas inteligentes, por por sobre todo, colaborativas y cooperativas pues las nuevas preguntas originarán nuevos conocimientos conjuntos y no como sucede ahora, como una simple ejecución de tareas fundada básicamente en la obediencia.


Wikipedia, (2014). Indagación apreciativa. Disponible en, http://es.wikipedia.org/wiki/Indagaci%C3%B3n_apreciativa y recuperado el 28 de Julio de 2014

Echeverría,Rafael. (2010). Escritos sobre aprendizaje. Las modalidades del habla y la senda de la indagación. Santiago de Chile: Editorial comunicaciones Nor Este


domingo, julio 13, 2014

Ciudadela, mi declaración


“Para ver claro, basta con cambiar la dirección de la mirada.
Antoine de Saint-Exupery

La ontología del lenguaje (Echeverría, 2005), plantea que los seres humanos nos constituimos en el lenguaje. Es con él y a través de él, que podemos cambiar y podemos observar “cómo vamos siendo”. Es usual que un gerente, en el conocimiento de su gente y de las cosas, les coloque etiquetas a sus subordinados y sea que aunque pase el tiempo, los siga viendo, observando y evaluando desde su misma perspectiva sin darse cuenta que las personas cambian constantemente; así su percepción y su comprensión de las cosas.

Un gerente de alto rango, debería estar adiestrado y capacitado para comprender el poder transformador del lenguaje y a través de su propia transformación. Para poder desarrollar la mega competencia gerencial del “escuchar” el supervisor debe conocer como escuchar. Debe saber que cuando escucha a un supervisado debe estar en “estado neutro” desde su conciencia y dejar que su “conversación interna” llena de juicios, sea solo para indicar el camino de la conversación y por sobre todo, para estar consciente de su propia humildad y “estar presente” para quién escucha. La soberbia, la sobre estima, la prepotencia, el conocerse y sentirse superior, no son los elementos correctos en una conversación de indagación en el otro, donde podemos ayudarlo a hacer la diferencia y a superar sus propios obstáculos y limitaciones. El coaching ontológico, desde la transformación del ser, es una de las vías que algunas empresas han escogido para lograr mayor efectividad en la comunicación empresarial.

Si un gerente desea hacer la diferencia con su gente, debe permitir que la transformación ocurra primera desde adentro. Con su historia, la experticia y los reconocimientos, es usual que la alta gerencia constituya una serie de juicios que a su vez lo constituyen en la persona que es y por lo que además, se sienta muy orgulloso. Eso está bien, siempre y cuando, que esos juicios que prevalecen en su conversación interna y actuando desde el poder que le otorga el cargo, no logren imponer en su gente un pensamiento único, igual como cuando uno se observa en un espejo. Porque su realidad, y su ser lo constituyen y quizá haga lo posible por influir sin escuchar y tomar decisiones concertadas; a eso lo llamamos el pensamiento o enfoque múltiple.

Ya lo ha dicho Heráclito, 500 años AC, cuando indica que "Nadie se baña en el río dos veces porque todo cambia en el río y en el que se baña." (psicópolis,2014). Así mismo, nuestro pensador Arturo Uslar Pietri quién además de escritor haya sido poeta, dijo “Sigo los pasos que quién voy siendo” en clara alusión a la transformación del ser y del conocimiento del estar. (Facilitymanager, 2013). El “estar siendo” viene a ser lo que somos y la forma en que interpretamos al mundo tal cual lo vemos en un momento determinado. Lo importante según ambas citas, es la capacidad que podamos desarrollar para ser el observador necesario de nuestros propios cambios, y así poder disolver, cambiar, re definir los juicios por medio de los cuales, solemos interpretar al mundo y a la gente que lo constituye. Cambiar nuestra visión de lo que “vamos siendo” nos permitirá sin dudas, se más justo, más eficiente y más coherente en el trato, supervisión y guía de los demás.

Decía Antoine de Saint-Exupery, el autor de El Principito en su libro póstumo, “Ciudadela”, (Exupery, 1945), que los hombres se empeñan en desmantelar las fortalezas que tanto trabajo les han costado construir, y que luego de ello, lo que les queda son un montón de piedras desarticuladas, y concluía, “Ciudadela, te construiré en el corazón de los hombres” Hoy en día, tras haber protegido mi propia fortaleza, le doy una nueva interpretación al texto, cuando en el proceso transformador de mí mismo, se haga necesario derribar murallas, y poder encontrarnos con la esencia del ser, y desde allí, y con humildad, poder construir una nueva fortaleza en el corazón, donde siempre, la conexión con el otro, la escucha, la comprensión, la humildad y el amor, sean cada una de las nuevas piedras fundacionales de la nueva fortaleza. 

Nadie se baña dos veces en el mismo río; esa es la observación que nos hacemos como observadores. Todo cambia; ese es el maravilloso proceso de transformación, desde el cual, podemos interpretar el mundo de una manera distinta, ser mejores personas, poder trascender, acercarnos al bienestar, y sin dudas, ser  mejores gerentes.

Alberto

Referencias bibliográficas:
Proverbia. Dichos de Exupery, diponible en http://www.proverbia.net/citasautor.asp?autor=290

Facilitymanager,(2013) Redibujarse en el trabajo http://facilitymanager.blogspot.com/2013/09/re-dibujarse-en-el-trabajo.html
Echeverría, Rafael, (2003) Ontología del lenguaje. Recuperado el 21 de Junio de 2014 y disponible en,
Echeverría, Rafael, (2007). El ciclo de la promesa. Conferencia Newfield Consulting. Material de apoyo del Programa de Certificación de Coaching Ontológico, Caracas: Indelser.