El sábado asistí a un taller que ya venía de dos días anteriores.
Como eran talleres individuales podía incorporarme al final; sin embargo no
todo era por partes pues ya los asistentes habían tenido dos sesiones para
conocerse y compartir; sobre todo si son talleres de coaching, inteligencia
emocional y psicología positiva. El hecho es que el sábado y casi como
contagio, ya podía sentir las buenas sensaciones y la alegría. Ya por
transferencia de varias personas que como quien pasa y te deja una información,
había podido construir ideas, conocimientos y hasta emociones de los ponentes,
aunque no los hubiera escuchado. Y es que según la Dra. Elsa Punset, tal y como
podemos ver en este vídeo, la alegría o la risa,es contagiosa. Las emociones positivas
acumuladas en una jornada positiva también, y según la propuesta, las neuronas
espejo, copian y hacen que nos podamos sentir bien y en sintonía con el
entorno.
Las empresas a veces se empeñan en querer implantar
proyectos que generen bienestar, pero no basta con declararlo, se requiere al
igual que la historia anterior, que además de parecerlo, que realmente sea. Si
una empresa declara que el optimismo debe ser una fortaleza empresarial, debe
comenzar por toda la directiva, para que en espejos y como quién deja caer agua
por una cascada, ocurra la transformación de arriba hacia abajo, por contacto y
por convicción. En situaciones difíciles y de crisis, las empresas pueden
pensar en incentivar el optimismo en sus trabajadores. Dice Wikipedia que el
optimismo “, al igual que la esperanza, es la doctrina y la disposición del
espíritu que aguarda lo mejor y lo más positivo de todo en psicología, ética y
filosofía”. Esperar lo mejor conlleva entonces una disposición a entregar lo
mejor que se pueda, en pro de un bienestar global y en la creencia, basado en
la esperanza, de que vendrán mejores tiempos, más productivos, innovadores y de
crecimiento personal, conllevando el bienestar general.
El optimismo es una disposición del espíritu que aguarda lo
mejor; y eso según la psicología positiva, se puede hacer en forma deliberada y
constante, pero quizá requiera de otras fortalezas, en este caso grupales, para
poder ser difundida y asentada como una fortaleza de la empresa. Para ser
optimista consciente actuando de forma deliberada y constante en pro de crear
condiciones que favorezcan a las emociones positivas y bienestar se requiere
que exista un medio ambiente de humor, donde además se incentive la creatividad
y donde seguramente sus integrantes hayan logrado concientizar el autocontrol.
(Un poco de inteligencia emocional). Pareciera también que debería existir también la
gratitud y la confianza. Esta última promovida por la organización para que la
autoestima individual, se conforme en una autoestima grupal y positiva. El
trato adecuado, el reconocimiento del otro, la aceptación de las diferencias,
el dialogo y la comunicación, solo son pequeñas partes del proceso que debemos emprender.
¿Qué hacer?
Implantar herramientas, o sistemas de medición u otra
herramienta digital, suele ser más sencillo que trabajar con la gente y sus
emociones. El interés de las empresas en estos temas, ya por si solo representa
un gran paso hacia el desarrollo del bienestar. No se trata en este caso de
medir una conducta asociada al desempeño, se trata de una transformación
deliberada y mantenida de una parte de las condiciones de la cultura. El
tránsito de la nueva visión esperanzadora y comprometida pasa principalmente
por mantener una conversación sincera y constante, trabajada siempre desde la
verdad y la confianza. El desarrollo del compromiso organizacional ha de ser
una meta y esta pasa por conocer completamente las necesidades y aspiraciones
de la gente, en un ambiente positivo, de reconocimiento y premiación al trabajo
creativo y productivo. Al final, todo se trata de saber escuchar.
Lecturas y bibliografía:
El optimismo, al igual que la esperanza, es la doctrina y la
disposición de espíritu que aguarda lo mejor y lo más positivo de todo en
psicología, ética y filosofía. Se considera en estos ámbitos como corriente
opuesta al pesimismo. http://es.wikipedia.org/wiki/Optimismo
“Generalmente se asocia el optimismo con el buen humor, sin
embargo existen otras variables ligadas a él como el foco de control, también
conocido como locus de control, término que se usa para determinar cómo el
individuo atribuye lo que le ocurre en la vida. En ese sentido, una característica
particular de los optimistas está responsabilizarse de lo que le sucede y
buscar causas internas a la situación, más que culpar a otros de su realidad,
lo que significa poseer un foco de control interno”. http://ventaninterior.blogspot.com/2009/03/la-psicologia-positiva-y-el-optimismo.html
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