jueves, noviembre 24, 2016

El coaching apreciativo y el Mago de Oz

La lectura sin duda, es una llave para salir de la estaticidad y además tiene efectos liberadores en la mente. Sirve, entre muchas cosas, para darnos cuenta de acciones que no hemos podido hacer, de historias que nos inspiran, de formas de ver el mundo, y muchas aspectos mas. Leer, desde la ontología del lenguaje, desarrolla el ser, ya que en la lectura trabajamos con afirmaciones, juicios, promesas y declaraciones. Es posible que en la lectura de un libro, tras un pasaje, podamos decir:

 -aahhh, eso es...!, en voz alta, convirtiéndose en un "darse cuenta", que en muchos casos mueve, transforma y nos conduce a la acción. La ontología del lenguaje plantea que la palabra es acción y la acción genera a su vez, ser. Leer es una maravillosa forma de hacernos cargo de nuestro propio destino y nuestra propia vida. (Como dice el poema Invictus)

Ya nuestro poeta venezolano y literato  Arturo Uslar Pietri (1a), dijo hace algunos años en un poema, "sigo los pasos del hombre que voy siendo". Maravillosa frase que nos plantea que si andamos distraídos en la vida, quizá podamos pensar que somos alguien que hemos dejado de ser un tiempo atrás. Y nos damos cuenta en las personas que se limitan, lo hacen basándose en prejuicios de años pasados, basados asì mismo en miedos  ya superados, o peor aún, basados en juicios que otras personas hacen de nosotros mismos. Ya Mandela tras sus 27 años de encierro leía siempre el mismo poema "Invictus" cuyo contenido le indicaba que era el capitán de su alma, el dueño de su destino". Y es así, y los sabios filósofos contemporáneos Maturana, (4) y Echeverría, (5), plantean que uno es capaz de diseñar-se junto a  (como) los dioses, su propio destino, y que a través del lenguaje se puede llegar a ser lo que uno se proponga ser. Martín Seligman (3) el padre de la psicología positiva nos dice también que esto lo podemos lograr a través del conocimiento de nuestras venticuatro fortalezas de carácter, las cuales se van moviendo de acuerdo como nos vayamos moviendo, dejando la noción del "ser inmutable" de los metafísicos, contra al "estar siendo" de Arturo Uslar Pietri. Con este conocimiento y con los libros nuevos de crecimiento personal ,es que podemos construir poco a poco un nuevo ser, reconociendo las fortalezas que tenemos para alcanzar metas. Ya no decimos "yo soy", lo cambiamos por "yo estoy siendo". En este proceso, nos puede acompañar un terapeuta, un coach o un amigo. (2)

Una de las empresas que asisto desde el crecimiento organizacional utilizando el poder  de transformación del lenguaje, acaba de implantar un club de lectura. Con pocas excusas, la gente de la empresa puede conseguir ejemplares del libro escogido, en formato digital, como audio libro, como película en los cine foros, como ediciones impresas y como libros, como quién deja olvidado uno en una mesa, sabiendo de su poder transformador y liberador. Ya tenemos casi un año, y nos proponemos ahora a hacer mediciones de impacto laboral, personal y de clima organizacional. Este mes le ha tocado a cuentos infantiles, en el deseo que además de motivar al hábito de la lectura, esto sea hecho con sus hijos, familiares o nietos. Hemos escogido tres libros, Hanzel y Gretel de los hermanos Grimm, que además hemos coordinado con una visita al teatro local a ver la obra; Tío Tigre y Tío Conejo, que son fábulas magníficas de nuestras raíces , de Tulio Febres Cordero y por último, el "Mago de Oz", un libro de L. Frank Baum, (1) que se volvió una película de referencia en 1939 y actuada magistralmente por la recordada Judy Gardland. Fue producida entonces por la MGM, hoy Time Warner.

Trata de una niña que huye de un miedo, y que es arrastrada a otras tierras, volando en su casa, por un tornado. Es una tierra de magos, brujas, animales voladores y seres que hablan y tienen deseos. Todos orientados a la acción. En la llegada aplasta a la bruja mala de este, y para regresar, debe preguntarle a un mago acerca del medio para hacerlo. En el viaje, conoce a un león que quiere ser valiente, a un espanta pájaro que quiere ser inteligente y necesita un cerebro, y a un hombre de hojalata que necesita un corazón. Los tres llegan a la morada del mago y les pide que acaben con la bruja mala del oeste, para que pueda regresar a su casa, y a los tres personajes, en conseguir lo que quieren. Al final, como una metáfora cada quién obtiene lo que quería, un poco porque ya "eran", pero no lo sabían, y la joven logra regresar a casa. "No hay lugar como la casa" dijo. Es un cuento ontológico sin dudas y trata del poder generativo de la palabra y el lenguaje, trata también acerca de llegar a ser lo que queremos ser, a través de realizar las declaraciones correctas, de reconocer nuestras sombras y abrazarlas, de darnos cuenta de nuestras fortalezas de carácter y hacernos de ellas para avanzar.

Es un cuento lleno de simbolismos, que quizá no fue realizada con ese fin; era un cuento infantil, pero que hoy nos sirve para mostrar conceptos de la ontología del lenguaje, que con la sola teoría, se haría difícil comprender. Las brujas del este y oeste son el reconocimiento de nuestro cerebro y la forma en que nos puede afectar o ayudar la inteligencia emocional, se trata de las sombras que nos habitan y que a veces no queremos enfrentar. Se ha estudiado que tenemos sombras ocultas que no nos dejan avanzar; las sombras son un conjunto de juicios propios e internos de los cuales quizá ni siquiera tengamos afirmaciones que los respalden.  Los tres personajes que acompañan a Dorothy por el camino amarillo representan la estructura de coherencia de los seres humanos, tanto usado en la comprensión del coaching o de acompañar a otros; son el lenguaje, el cuerpo y las emociones o el pensar, sentir y actuar. El león que quiere ser valiente es la acción, el hombre de paja que quiere un cerebro, es el pensar y el hojalata que quiere un corazón es el sentir en la emoción.Lenguaje, cuerpo y emoción; la triple coherencia que los coaches tratamos de indagar cuando acompañamos a otros. 

Cuando se encuentran al mago deben entrar uno a uno y lo realiza con los cuatros elementos que acompañan a la acción y que es conocimiento fundamental para un coach, el agua de lo femenino, la cara encendida del fuego en lo masculino, el animal de la tierra en lo femenino y lo etéreo del lo masculino, en el aire. De hecho, en el encuentro con la bruja mala del oeste logra desvanecerla con agua, que es el elemento femenino del amor, cuando trató de apagar el fuego en el espantapájaros.

El Mago de Oz al igual que el libro "El Principito" se trata de un viaje interno, eso que hacemos cuando decidimos que debemos o necesitamos cambiar. El ideal de un asistido y el de un coach, es llegar a casa nuevamente, es como un viaje y llegamos a ser nuevamente, o mejor dicho, llegamos a "estar siendo" nuevamente, en el entendido que en este viaje nos hicimos dueños de nosotros mismos y realizamos acciones para avanzar por encima de las sombras, brujas o magos que nos limitan. Por eso Dorothy al final, cuando no sabe si lo vivió o lo soñó, es que diga " no hay lugar como el hogar". Se trata siempre al coaching, como acompañar a  un viaje de regreso a casa.


En su libro Indagaciòn Apreciativa, Subirana y Cooperrider, (6), desarrollan un nuevo modelo de la estructura de coherencia en el cual juntan al cuerpo y la emoción y dejan el lenguaje, agregando la experiencia. Claro desde la IA se piensa que lo que hemos vivido y hemos hecho mejor, es fundamental para lograr metas futuras. Se trata de soñar con nuestras potencialidades. Como coach, cuando vemos a alguien, no solo vemos lo que es en ese momento, sino todo lo que puede llegar a ser. Si aceptamos entonces que la experiencia ahora pertenece a la estructura de coherencia, lo que le haría falta al modelo es dejar las tres distinciones, (cuerpo, lenguaje y emoción), pero lo encerraría en un nuevo circulo que diga "Experiencia". Quizá, la gente de la tercera edad cuando pierden sus recuerdos con alguna enfermedad, es que también ven afectados sus otros tres dominios, el lenguaje, las emociones y lenguaje corporal. 

Incorporemos entonces, la parte apreciativa de la historia de una persona, para que, en una sesión de coaching, los ayudemos a construir futuros de expansión, que los acerquen mas, a la felicidad anhelada y al bienestar pleno.

Alberto

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Referencias:


1. Baun Frank. El Mago de Oz. (2016) Wikipedia, recupera y disponible en https://es.wikipedia.org/wiki/El_mago_de_Oz 


1.a. Pietri, A. (2016) Wikipedia. Recuperado en noviembre 2016 y disponible en su biografía en https://es.wikipedia.org/wiki/Arturo_Uslar_Pietri

2. Lindner, A (2016). La mejor versión de mi mismo, recuperado en noviembre 2016 y disponible en, http://facilitymanager.blogspot.com/2016/05/la-mejor-version-de-mi-mismo.html

3. Seligman, M. (2016). Test VIA de las fortalezas de caracter Disponible en https://www.authentichappiness.sas.upenn.edu/es/home

4. Maturana, H. (SF) Ontología del lenguaje. Recuperado en Nov 2016 y disponible en http://www.buenastareas.com/materias/resumen-de-la-ontologia-del-conversar-de-humberto-maturana/0

5. Echeverrìa R, (2016) Recuperado en noviembre 2016 y disponible en http://es.biblioteca-virtual.wikia.com/wiki/Ontolog%C3%ADa_del_lenguaje 


6. Cooperrider,D, Subirana,M. (2013). Indagaciòn apreciativa. Kairós, Baecelona

jueves, noviembre 10, 2016

La escucha activa como materia pendiente en los estudios de RRHH

Hablar es a escuchar como la oratoria lo es a la “escuchatoria

La gente que escucha se les dice escuchador, que si existe en el diccionario de la Real Academia Española, RAE. Lo propio del orador es la oratoria. Ser orador significa, contar con “el arte de hablar con elocuencia”.  Escuchatoria no aparece en ningún diccionario aun, ni en el RAE, ni en el Escolar, etc; sin embargo, pareciera que tiene sentido que exista la expresión, sobre todo si el ser escuchador, se va a convertir en una competencia del líder contemporáneo.

Escuchar, según la ontología del lenguaje, se compone de dos elementos; uno, derivado de la capacidad biológica que tenemos de percibir una imagen o un estímulo visual, y segundo, en la capacidad de poder interpretar lo que estamos observando. Por lo tanto, pueden existir innumerables factores que hacen que quién habla y quién escucha no estén en sintonía, ni hablando del mismo tema. A ese conocimiento gerencial de reconocer con humildad la diferencia de los que dialogan, sea el cerrar las brechas, o aproximar la escucha.

Siempre hemos dicho que escuchar es percibir mas interpretar, pero por lo antes expuesto, pareciera que la validación de quién escucha sea muy importante para avanzar en una negociación, una entrega de juicios laborales, una interpelación o un diálogo. Salir del mundo de la obviedad en la que generalmente nos encontramos, es fundamental para una comunicación eficaz. A veces e inclusive, es que dos personas que discuten en temas que no le son conocidos en todo o en parte; deban ponerse de acuerdo en las distinciones de las cosas sobre las cuales se conversa. Imaginémonos una conversación entre un físico nuclear y un arquitecto, por ejemplo. Ambos deben ponerse de acuerdo en cómo llamar a las cosas. En la medida que esto ocurra, ocurrirá así mismo, un diálogo más fluido. Se pasa de conversaciones para poder tener conversaciones, a conversaciones de juicios o de coordinación de acciones.

ESCUCHAR= PERCIBIR + INTERPRETAR + VALIDAR LA ESCUCHA

También hemos mencionado a la humildad como un ingrediente para una escucha efectiva y activa. En una conversación de dos personas, no existe una sola conversación, sino tres; la de ambos, mas la de cada uno consigo mismo. Mejorar una conversación lo llamamos como  “bajarle el volumen” a nuestra conversación interna. Si no lo hacemos, corremos el riesgo de perder toda la capacidad de escuchar y transformarlo en la necesidad absoluta de tratar de convencer al otro de nuestros puntos de vista.  Es entonces y quizá, que la “escuchatoria”, venga a ser una aptitud de adquieran los líderes justo en la creación del hábito de escuchar. Escucha activa, le decimos, donde el que escucha, reconoce al otro como legítimo en sus planteamientos, y acompasamos lo que dice con observaciones pertinentes, enriquecedoras, y que favorezcan la construcción de conocimiento. Eso es un poco, aprender a conversar en la paz.

La escucha activa, para llegar a ser un escuchador, debe convertirse desde la ontología del lenguaje, como una materia necesaria para todos aquellos comunicadores o profesionales de los RRHH que manejamos personas o que guiamos como líderes a otros, en su desarrollo y su desempeño.

No me queda ninguna duda, que aprender a escuchar debe ser la competencia más importante de los nuevos gerentes, los innovadores, los transformadores. Por eso, al igual que talleres de oratoria, debemos dictar talleres para aprender a escuchar, que sin duda, es la base para ser un buen orador. Esperemos entonces, que aparezca la palabra “escuchatoria


Alberto

PD: la imagen la tomé en una casa. Se trata acerca de la soledad, de mucho escuchar, de lo que queda, de la esperanza. La silla rota representa lo mucho que puede contar, y además sirve para mostrar un mundo de posibilidades que se abren desde el observar. Valga la explicación para centrar las interpretaciones y validad las imágenes entre ustedes y yo.